Las ciudades inteligentes son aquellas que, mediante el uso de las tecnologías, la innovación y todos los recursos disponibles, proporcionan servicios tradicionales y buscan resoluciones sobre cuestiones urbanas. Las Smart Cities facilitan la movilidad, son sostenibles y mejoran los servicios sociales, simplificando el día a día de los habitantes. Este tipo de ciudades tienen como fin fomentar la calidad social y económica, maximizar la inclusión social y reducir los residuos generados. La adopción de las tecnologías emergentes, para mejorar la calidad de vida de las personas, se ve cada vez más reflejada en las grandes ciudades.
A medida que las ciudades se vuelven inteligentes, también lo son sus transportes, edificaciones e infraestructura. El fin común que tiene digitalizar todos estos servicios y espacios, es controlar el acceso y la seguridad de las personas, el uso de los recursos y la eficiencia energética, y realizar una gestión eficiente y controlada de todos los sistemas. Esto no solo impacta en la calidad de vida de las personas, sino de todo el planeta. La urbanización es un fenómeno que no tiene fin, la sostenibilidad ambiental, social y económica es una necesidad fundamental para seguir el ritmo de la rápida expansión a la que se enfrentan las ciudades actualmente, y que desafía los recursos de nuestras ciudades.
La composición fundamental de las ciudades inteligentes son las Tecnologías de la Información y la Comunicación, lo que posibilita generar, implementar y promover prácticas de desarrollo sostenible para abordar los crecientes desafíos de la urbanización. Este marco TIC está formado por una red inteligente de máquinas y objetos conectados que transmiten datos a través de la tecnología inalámbrica y la nube. Las aplicaciones del IoT basadas en la nube reciben, analizan y gestionan datos en tiempo real, ayudando a municipios, empresas y ciudadanos, a tomar las mejores decisiones.
Con la inclusión del metaverso, y la creación de nuevas tecnologías, las personas tienen más acceso a interactuar con las ciudades inteligentes, a través de dispositivos móviles, computadoras e incluso autos. Este ecosistema digital está compuesto también por los denominados Edificios Inteligentes, que están en auge en todo América latina, y son aquellos cuyos sistemas e instalaciones, como la iluminación, electricidad, climatización, seguridad, telecomunicaciones, controles de acceso y muchas otras más, están gestionadas y controladas de forma integrada y automatizada, aumentando así la eficiencia energética, la usabilidad, la seguridad y la accesibilidad.
Existen 4 elementos esenciales necesarios para el correcto desarrollo de las ciudades inteligentes:
- Conexión inalámbrica generalizada:
La conectividad inalámbrica y omnipresente, prestada a través de tecnologías de red amplia de baja potencia, LPWAN, son idóneas para la mayoría de las aplicaciones de ciudad inteligente por su rentabilidad y ubicuidad.
- Seguridad confiable:
Las Smart Cities tienen tendencia a ser seguras y confiables debido a las cámaras conectadas, sistemas viales inteligentes y los sistemas de monitoreo de seguridad pública. Sin embargo, aún existen otros factores que pueden afectar la seguridad de este ecosistema, y son los ciberdelincuentes. Para evitar este tipo de intrusiones, se deben cumplir 4 objetivos de seguridad básicos: disponibilidad de los datos en tiempo real y confiable, integridad de los datos, confidencialidad de la información sensible y responsabilidad de los usuarios. A su vez, es fundamental integrar al ecosistema, soluciones de autenticación robusta y de gestión de ID para garantizar que los datos se compartan solo con las partes autorizadas, que protejan, además, los sistemas de backend de intrusiones y piratería.
- Datos abiertos:
Si bien existen datos sensibles que deben ser personales de cada usuario, un elemento esencial necesario para el desarrollo de las ciudades inteligentes es la capacidad de los participantes de compartir información y combinarla con datos contextuales que se analicen en tiempo real. Múltiples sectores deben cooperar para tener resultados sostenibles mediante el análisis de la información contextual en tiempo real, que se comparte entre los sistemas de información específica del sector y los sistemas de tecnología operacional.
- Esquemas flexibles de monetización:
En la era de la comunicación, el IoT y las ciudades inteligentes, los datos son la mejor forma de generar ingresos. Para que estas ciudades prosperen, es necesario establecer modelos de comercio sostenibles en dónde todos los participantes reciban su parte. El software debe integrarse en la estructura de las soluciones del IoT para que todos los contribuyentes al ecosistema se beneficien.
El IoT contribuye a la generación de ciudades inteligentes de la mano de la conectividad inalámbrica segura. Con la constante expansión de las áreas urbanas, la necesidad de ciudades inteligentes que avancen lado a lado con las tecnologías, continúa en aumento. La tecnología puede mejorar diferentes aspectos básicos de la vida diaria de las personas como el viaje al trabajo, el cuidado de la salud, mejorar la conexión social y ofrecer un entorno más limpio y sostenible. Muchas ciudades ya han comenzado su transformación, y otras apenas están iniciando el proceso. Desde Noventiq ponemos al alcance de entes gubernamentales las soluciones necesarias para que esta digitalización comience y avance de la forma más eficaz posible, asegurando el cuidado de la seguridad de las personas y buscando en conjunto un bienestar global para las comunidades.